En un ambiente de música, alegría y fe, el obispo auxiliar de La Serena, monseñor Enrique Balzán, presidió la misa inaugural, concelebrada por veinte obispos y decenas de sacerdotes.
En una carta a la comunidad, el arzobispo Mario Cargnello recordó que la indulgencia 'es una respuesta del amor infinito de Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo'.
En Villa Cura Brochero hay misas diarias, adoraciones, confesiones y también una serie de meditaciones. La misa de clausura se celebrará el domingo 26 de enero en plaza Centenario.